Prometo resistir ... ¡!!

… Hoy tengo ganas de hacer catarsis… sino reviento. Se que me notan ausente… pero estos ultimo quince de días me paso de todo. La madre abnegada estudia con sus hijos… prepara desayuno, almuerzo merienda, cena; no sea cosa que los nenes me queden famélicos… Estoy sin mucama, así que soy su reemplazo… como si esto fuera poco… se me rompe el caño del vanitory, de mi cuarto de baño. No se si les conté que la persona que hacia el mantenimiento de esta casa, falleció hace un mes… Rubén “fogonazo”… el porque del apodo… siempre te hacia saltar la térmica;… la electricidad y mi paciencia. Pero era la persona de confianza… me podía ir tranquila. Les sigo relatando mis desventuras… Llamo al plomero, o fontanero, o como cada país lo llame; que me recomendaron … dice que pasa al mediodía, lo que no dijo , si era del día siguiente o dentro de un año … brillo por su ausencia … me clave, todo la tarde. Sabia que estaba con un trabajo importante, no queda otra que esperar… cada vez sale mas agua… Como mis días debían seguir complicados, faltaba la frutilla del postre… término de lavar los platos, seco… cuando voy a guarda… el bajo mesada, lleno de agua… Conté hasta cien… saque todo… seque todo… me duche y me fui a dormir… mejor que nadie dijera una sola palabra… porque moría entre mis manos. En la mañana, se vuelve hablar con esta persona y dice que pasa a la nochecita… No lo pensé dos veces… había postergado el gym… pero no quería dejar de ir a la peluquería… las canitas, no perdonan… A las nueve de la mañana, me fui. El almuerzo preparado, solo debían ponerlo en el microondas… y lavarse el plato… no se iban a herniar. Volví a las dos de la tarde, renovada… me corte, cambie color… (al mal tiempo buena cara); para venir a poner orden … pasar la aspiradora… hacer las camas de los niños… barrer las hojas del patio… y a seguir esperando… Aquí la razón de mis ausencias… muchas veces saldría corriendo; prometo resistir, no podrán conmigo… De a poco me voy ordenando… para volver. Y recuerden: “El humor es la gran coraza con la que uno se defiende en este valle de lágrimas”. C.J. Cela. Siempre en mi corazón… Silvi.